El que no está conmigo, está contra mí. // Lucas 11:23
A veces mi corazón es un campo de batalla. La rutina me absorbe, voy tachando días en el calendario, contando los que quedan para vacaciones, y de tanto mirar el reloj, me voy olvidando de saborear lo que tengo delante. A veces, es fácil ir en piloto automático, y perdernos pequeñas maravillas: un amanecer, una tarde jugando con tu hermano pequeño, una llamada a algún amigo que tenemos pendiente.
Hace poco leí algo que me quedó grabado: “Dios me habló hoy en las flores, y yo que esperaba palabras, casi me pierdo la conversación”. Me detuve a pensar cuántas veces, buscando grandes signos o manifestaciones, me olvido de que Dios también está en lo pequeño. Que los milagros ocurren en nuestro día a día, en el vaivén de la locura que a veces me consume, y que Él nos encuentra allí, donde estamos.
El Evangelio de hoy me resuena en esto. Jesús nos recuerda que un reino dividido se derrumba, y que cuando el espíritu inmundo encuentra la casa barrida pero vacía, puede volver peor que antes. Me hace mirar a mi corazón y preguntarme: ¿Cuántas veces lo limpio por fuera y lo dejo vacío por dentro? ¿Cuánto de mí está realmente entregado a Dios? ¿Estoy a la escucha activa, o simplemente dejo que los días pasen sin abrirme a lo que Él quiere decirme?
Hoy le pido a Jesús que nos ayude a vivir despiertas. A no ser indiferentes con lo que pasa a nuestro alrededor. A sentir en carne viva, a dejar que nuestro corazón arda. Que cada gesto, cada palabra, cada minuto que damos, sea una ofrenda viva. Porque el mundo necesita personas que no caminen dormidas, sino que permitan que Cristo habite, transforme y haga florecer todo lo que toca.
¡Deja que Jesús transforme lo que parecía ordinario! Porque al estar con Él, no hay neutralidad; significa abrir el corazón y dejar que su Reino comience a hacerse presente en cada rincón de nuestra vida.
// Elisa Gómez es una joven mitad española y mitad portuguesa, que ha sido transformada por el amor. Es la mayor de 5 hermanos y está estudiando Derecho y Relaciones Internacionales. Tiene una gran pasión de ayudar a los demás y dedica gran parte de su tiempo al voluntariado. Le fascina la belleza cada atardecer y la música. Al igual que “el amor le explicó todo”, quiere llevar ese amor a todos los que la rodean.