Él les respondió: “¿Por qué tienen miedo? // - Mateo 8:26
Estaba en medio del día, con mil cosas en la cabeza y una sensación de agobio que no me dejaba en paz. Mi mente iba a mil por hora: cosas que no había hecho, conversaciones pendientes, decisiones que necesitaban una respuesta. Y en medio de todo eso, me vino esta frase: “¿Por qué tienes miedo?” Me quedé en silencio. “Porque sí, tengo miedo. Porque soy impaciente, porque quiero que todo esté resuelto ya, porque a veces me cuesta confiar”. Pero justo en esos momentos, cuando suelto, cuando dejo de intentar controlarlo todo, cuando realmente confío en Dios… ahí es cuando la tormenta se calma. Y una vez más, Él me confirma que está conmigo.
Hermanas, Jesús nos ama con una ternura infinita. Él nunca, nunca, quiere algo malo para nosotras. Nos cuida siempre, incluso cuando no lo vemos, incluso cuando sentimos que estamos solas en la barca. Pero no estamos solas. Él está ahí, presente, deseando que lo invitemos a vivir la tormenta con nosotras. No para evitarla, sino para atravesarla juntos.
Y lo más bello es que, incluso cuando nos impacientamos, cuando dudamos, cuando le exigimos con lágrimas “¡Haz algo ya!”, Él no se aleja. Viene, nos habla con amor y autoridad, y calma el mar. Así es su amor: fiel, firme, paciente.
Hoy, esta palabra es una invitación a soltar el miedo, a confiar con todo el corazón. No estamos llamadas a tener todo bajo control, sino a recordar quién está en la barca con nosotras.
¿Qué tormenta estás tratando de controlar tú sola? Hoy te invito a entregársela a Él. Déjalo ser tu calma.
// Arianna Santamaría es de Guayaquil, Ecuador, y vive en Madrid, España junto a su esposo. Aunque creció en una familia mariana y participó desde pequeña en misiones familiares, fue en la Universidad de Miami donde vivió un encuentro más profundo con Dios, gracias a una comunidad católica auténtica, al rosario y al ministerio de llevar la Eucaristía a personas mayores. Hoy, mientras se adapta a una nueva ciudad, a su trabajo en el sector tecnológico y a su vocación de esposa, busca maneras de compartir su fe también en el mundo digital. Le encanta caminar por el parque de El Retiro con su esposo, hacer pilates, viajar y disfrutar en familia. Sus modelos de santidad son los santos esposos José y María y Luis y Celia Martin.