Dios entrañablemente compasivo, todo amor y lealtad, lento a la cólera, ten compasión de mí, pues clamo a ti, Señor, a toda hora. // Salmo 85
En la primera lectura de hoy escuchamos sobre Jonás: un profeta que por su orgullo se opone a la voluntad de Dios. Para ser completamente honesta, lo primero que pienso es: “¡Qué dramático y soberbio!” Pero entre más medito en este libro, más me doy cuenta de que es un simple espejo que me refleja a mí.
En el primer capítulo de Jonás, el Señor dice que va a destruir a esa ciudad por su maldad (Jonás 1:2) actuando con justicia. Mientras se desarrolla la historia Dios le va enseñando a Jonás, cómo le reveló a Santa Faustina, su atributo más grande: la misericordia (Diario de Santa Faustina, 301). Y para ser completamente honesta es muy incómodo. Nineveh no era un pueblo aleatorio, sino era un pueblo lleno de oscuridad y enemigo de los hebreos (Nahum 3:1). Dios incluso afirma la existencia de la maldad y destrucción en ese pueblo pero aun así le extiende misericordia. Él lleva a Jonás en esta aventura para que él haga lo mismo.
Ahora me pregunto: ¿Esta misericordia se refleja en mí? ¿Qué hago en mi corazón cuando veo hermanos oponiendo las enseñanzas de la Iglesia? ¿Prefiero escoger oscuridad y muerte en mi corazón en vez de vivir con el amor y misericordia de Dios?
La invitación de hoy es la misma de Jonás: debemos arrepentirnos, agrandar nuestros corazones con su misericordia y dejar que Él nos llene.
Hermana, te invito a pensar en alguna situación en la cual se te hace difícil extender misericordia. Reza con el Salmo (85:15b) de hoy: Ten compasión de mí, pues clamo a ti, Dios mío, todo el día, y ya que a ti, Señor, levanto el alma, llena a este siervo tuyo de alegría.
// Joanna Valencia nació en Venezuela y se crió en Miami donde aprendió a hablar “fluent Spanglish”. Conoció a sus dos mejores amigas, Santa Teresita de Jesús y Santa Faustina, durante una misión en Haití y desde ese entonces su vida cambió. En el 2023 renunció a su trabajo para servir como misionera católica en la Isla de Santos y de los Sabios.