LECTURAS DE HOY 

“A ése le abre el que cuida la puerta, y las ovejas reconocen su voz; él llama a cada una por su nombre…“ // Juan 10, 3-5

Hay temporadas en mi vida en las que me siento cargada por el peso del pecado, y eso provoca en mí confusión, desorden y una dificultad para escuchar con claridad lo que el Señor quiere mostrarme. En medio de mi debilidad, es la voz del enemigo la que intenta oscurecer mi relación con Dios.

En el Evangelio de hoy según san Juan, Jesús se revela como el Buen Pastor que llama a cada una de nosotras por nombre y nos guía hacia una vida en abundancia. El ladrón, que sólo viene a robar, matar y destruir, representa las fuerzas del pecado, el miedo y las presiones del mundo que buscan robarnos nuestra verdadera identidad.

Las ovejas reconocen la voz de Jesús; seguir al Buen Pastor es parte de su naturaleza, no algo que necesitan razonar. Esto me hizo reflexionar: ¿Cómo escucho yo la voz del Señor, especialmente en esos momentos en los que me siento vencida, nublada por el pecado, o preocupada por cumplir con las expectativas de los demás?

Hermana, ¿Estás sintonizada con el suave y fiel llamado del Pastor, aún en medio de tus caídas y del ruido del mundo? Como ovejas, estamos llamadas a confiar y seguirlo, sabiendo que Él siempre nos lleva a un lugar seguro, hacia el pasto verde de su amor, simplemente porque te ama.

En lo personal, cuando siento que estoy fallando y comienzo a desviarme —como una ovejita que camina en la dirección opuesta— el Señor me recuerda que siempre tengo un lugar al que regresar. Él me espera, siempre con los brazos abiertos, y me recibe de nuevo por esa puerta santa. Hoy me encuentro ahí, regresando una y otra vez al corazón del Señor, aceptando su invitación a la misericordia y a un nuevo comienzo. Él me permite crecer incluso en medio de mis luchas, sostenida por su abrazo — soy esa pequeña oveja, acuñada en sus brazos.

Al seguir a Cristo, recordemos que la vida abundante que Él nos ofrece no es sólo una promesa futura, sino una realidad que comienza aquí y ahora. Es una vida que florece cuando caminamos bajo su cuidado y su amor, plenamente vivas en la libertad que solo Él puede darnos.

Mi oración por ti es que la voz del Señor sea más grande que cualquier otra voz en tu vida.


// Paulina Cambron es católica de nacimiento, esposa, hija, hermana, madrina, y consejera universitaria pero su título favorito es el de 'hija amada de Cristo'. Nacida y criada en el área de Greater Palm Springs, su relación personal con Dios floreció a los 18 años, cuando participó en su primer retiro para jóvenes. Desde entonces, ha servido en diferentes ministerios de su parroquia, siendo su favorito el trabajo con la juventud. Actualmente, dirige una comunidad de fe de mujeres llamada Devoted to Proverbs 31, y continúa sirviendo al Señor como misionera en retiros del Programa Misionero del Valle en Coachella, CA, donde hombres y mujeres encuentran un encuentro transformador con Dios. La pasión de Paulina radica en ayudar a los demás y compartir la belleza de su fe católica, así como lo que Dios ha obrado en su vida.....todo mientras disfruta de una taza de té.

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